19/07/25

Una presencia luminosa

 


19 julio 2025

- Alguna vez, ya no me acuerdo, pequé de olvidarme del pecado de ser feliz, aún y queriéndolo ser. Nadie me lo reprochó nunca, solo yo quise hacerlo, mi profesión era casi todo mi mundo, pero me olvidé de contármelo. Ahora todo pasó, Ella me salvó, me arrastró hasta el mundo de los vivos, vivo, soy feliz y adoro serlo.

- Desde entonces, aprendí que la felicidad no se suplica ni se esconde: se vive con la piel, se celebra en silencio y se agradece con el alma. Ella no fue solo salvación, fue memoria, fue vida. Porque a veces, basta una presencia luminosa para recordarnos que estamos hechos para la alegría, incluso cuando lo olvidamos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Una presencia luminosa

  19 julio 2025 - Alguna vez, ya no me acuerdo, pequé de olvidarme del pecado de ser feliz, aún y queriéndolo ser. Nadie me lo reprochó nunc...