Fotografía obtenida con la ayuda de la IA - Copilot
28 marzo 2025
– “Hablábamos y lo hicimos sin parar durante unos largos minutos, quizás fueron horas.
- Empezamos hablando de la oscuridad de los sueños de nuestra infancia y de aquellos anhelos que nunca llegamos a ver cumplidos en su totalidad.
- Luego seguimos recordando viejas experiencias comunes, la silenciosa misa en la barcelonesa Plaza de la Catedral en viernes Santo; la sorprendente vista que ofrecen los túneles de ese singular viaje en tren por la rocosa costa de La Marina Alta; la misteriosa atracción que nos ofrecían esos cines de nuestra infancia donde siempre proyectaban películas en blanco y negro; la oscuridad inmensa del interior de esas viejas casas de la Barceloneta de los 50 cuando se rezaba la muerte de algún viejo olvidado en el día de las apologías que nunca recibió en vida; la más que previsible oscuridad de nuestro futuro como humanos al saber que en 2050 no habrá agua potable y que la mitad de las especies ahora conocidas habrán desaparecido de la faz de la tierra.”
- Para, Manuel, para - le dije - no seamos pesimistas, nada cambió, quizás seamos nosotros los que hemos cambiado. Le mostré el dorsal de mis manos y le apostillé: ¿Te das cuenta? nos hemos hecho viejos, sólo es eso. ¡¡¡Larga vida a nuestros sueños!!!
- Mientras Manuel me abrazaba a modo y forma de despedida temporal, me susurró cerca de mi oído bueno: ¿Tú crees que sabemos de lo que hablamos? ... sólo sonreímos. Adiós, Manuel, adiós, Enrique.