Ruinas que respiran
13 septiembre 2025
- Hoy no es un día especial, no estoy en tiempo de vacaciones, no estoy hospitalizado y aunque no pueda (casi), andar aún puedo conducir y ello me hace sentirme útil y escasamente exangüe, pues puedo salir hacia todos aquellos templos del ayer y del hoy amigo, que me hacen sentir vivo. Puedo bajar la ventanilla del amable vehículo que me lleva a todas partes y dejar que el aire marino entre por mis dañadas fosas nasales como si del mismo incienso papal se tratara incensando todo el entorno que más amo.
- Me miro donde sea capaz de verme y me doy cuenta de que soy un tipo con suerte, que aún tengo mucho por hacer, pero ¿qué?, ¿dónde?, ¿cuándo? Sueño con que existo en un mundo cuyo atrio ceremonial y sus pilares están esperando que les dé las órdenes que necesitan recibir para que todo se repare, que la vida vuelva a ser vida para todo el mundo que se sienta persona, que los sentimientos ganen terreno al poder y que las esencias de los más puros deseos hagan que de nuevo el futuro para todo este entorno sea algo agradable, deseable y natural.
- Hoy, desde este rincón de conciencia y memoria, doy fe de que el futuro no es una quimera: existe, nos espera, y en él estarán quienes más amamos. Mi sueño no es pequeño, ni pasajero; es un llamado profundo a quienes poseen el poder y el saber de restaurar los valores que han hecho del ser humano una especie capaz de sentir, pensar y trascender. Propongo la lucha serena, el esfuerzo constante, el valor que no se rinde y el espíritu que se eleva incluso en la adversidad. Que esta imagen de ruina iluminada sea símbolo de lo que aún puede renacer: que los templos del alma se reconstruyan, que el aire vuelva a ser incienso, y que la vida, por fin, se llene de sentido.
Gran verdad, querido amigo... Que la vida esté siempre plena de sentido...
ResponderEliminarAhora mismo leía algo de una explosión en Madrid, con no se cuantos heridos y destrozos... Ay, Señor, que fragiles somos...
Un abrazo
Así es, amigo Ildefonso. Frágiles y pequeños, tanmto que en un moemento desparecemos y nada queda, sólo el sentimiento creado en aquellos que te rodean y sucede sin que nunca jamás llegues a saber si fue así.
EliminarUn fuerte abrazo, rey de la fotografía.
Aún tenés muchos textos así para darnos, Enrique. Exacto. El futuro te espera también por ellos y por todo el bagaje que tenés cosechado, porque profetizan ese mundo nuevo que tanto ansiamos, esos valores que perdimos los seres humanos, quién más quien menos...
ResponderEliminarAbrazo admirado hasta el otro lado del charco atlántico, palabra autorizada, inspirador amigo.
Gracias, querido Carlos y gran poeta, mi señor amigo Perrotti. Yo te admiro y agradezco tu comentario y mucho. Repito: Gracias.
EliminarUn fuerte abrazo, poeta.
Es bueno salir y no encerrarse en casa. Hay mucho que ver por todas partes.
ResponderEliminarFeliz domingo de descanso.
Gracias, VdF, agradezco el consejo, pero mis andares están anclados al 80% a una silla de despacho, mi FSHD se ha puesto en este último año muy impertinente y dominadora y no quiere que me mueva.
EliminarUn abrazo de domingo.
La fuerza de luchar contra la adversidad nos ayuda estimado amigo. he salido de un accidente terrible después de la perdida de mi compañero de toda mi vida y he salido con operación, luego cama, después silla de ruedas, andador y bastón, fueron meses y meses con la ayuda de mis hijos, pero sin el que fue el amor de mi vida, fue muy difícil. Hoy camino gracias a Dios y a mis hijos. Vos vas a salir a flote con fuerza y perseverancia. Te deseo lo mejor.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias, Maria Rosa. Siento vértigo al empatizar contigo, eres una mujer muy valiente. Enhorabuena.
EliminarResistiremos. Un fuerte abrazo.
Uno siempre debe agradecer lo que tiene. Te mando un beso.
ResponderEliminarSiempre, querida Judit.
EliminarUn abrazo, escritora.
Esos sueños, querido amigo Enrique, de describes en estas certeras reflexiones, ¡dalos por hecho!. Sobre todo en ese futuro que se forja día a día. Por quienes estamos hoy, todos, y por quienes continuarán!
ResponderEliminar¡Ni preocupar, Enrique!
Siempre lúcido y actual. Siempre esa palabra justa para describir la actualidad. ¡Propia y ajena! ¡Siempre desprovista de insulsez! Gracias, Enrique!
Gran abrazo. Buen domingo!
Gracias, querido amigo y mi salvador. Eres, siempre, muy amable conmigo.
EliminarUn fuerte abrazo, Ernesto.
Esa imagen en la que aún se filtra la luz por entre algunos derrumbes es un ejemplo acabado de lo que debe ser nuestra vida, un abrazo Enrique!
ResponderEliminarBien visto, María Cristina, un buen apunte positivo para estas lágrimas secas que buscan sencillez, amor, paz y un feliz futuro para este mundo cruel que hoy nos lo amenaza. Resistiremos.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hola, amigo Enrique. Después de leer tu hermosa reflexión que es un canto a la vida, solo puedo decirte y rogarte de que no cambies nunca en la forma de disfrutar de ese presente/futuro, y con ese espíritu que como tu bien dices no se rinde antes las adversidades sino que se eleva, dándole sentido a la vida en el presente que es como hablar del futuro a nuestra edad.
ResponderEliminarPreciosa y poética la narrativa que nos regalas.
Gracias, y un fuerte abrazo.
Gracias, mi admirado amigo Manuel. Eres muy amable.
EliminarUn fuerte abrazo.
Buen día Enrique. Creo que hoy, el mensaje que te voy a dejar, está algo "desencajado" de tu texto.
ResponderEliminarPero...Me acordé de este texto de M.B. justo hoy, 14 de septiembre, fecha de su nacimiento y me dieron ganas de compartir este fragmento:
"Defender la alegría como una trinchera
defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias
y las definitivas"...
Bueno...tal vez tu texto, sí tenga que ver, tal vez es tu manera de defender la alegría.
¡Buen domingo!
Va mi abrazo
Gracias Dulce Lu por recordarme uno de los muchos pasajes de mi admirado Benedetti. Precikoso y no desencaja en este escenario que hoy he dejado ver aquí.
EliminarUn fuerte abrazo, mi fiel y admirada amiga.
Lo que te decia ayer .Leer tus grandes reflexiones es reflexionar a la vez uno mismo .
ResponderEliminarQue razón tienes, somo gente con suerte .
Tenemos la familia perfecta , podemos aun valernos , aunque se con alguna dificultad que otra , podemos aun conducir (ya veremos hasta cuando) y podemos escribir y poner nuestars fotos en esta red social llamada blog y en mi caso,tambien en el fotolog.
Vamos a seguir asi , luchando y dando graciss a Dios por todo .
Un saludo.
Sí, Joaquín, somos gente con mucha suerte de haber nacido y vivido hasta aquí. La felicidad va conmigo y con muchísima gente que como nosotros nos gusta hacérselo saber al mundo para que lo apliquen en sus estrategias.
EliminarUn fuerte abrazo.
Es lindo ser optimista en la madurez. Indica que se vivió bien.
ResponderEliminarSaludos. primer a vez por acá
Así es, mi olvidado amigo JLO.
EliminarVoy a por ti de inmediato. Mi tiempo ya no es el que era.
Un abrazo.
Certera reflexión en estos tiempos que corren Enrique. Siempre lúcido tu análisis . Necesitamos que se esparza entre todos esa lucha serena, ese esfuerzo constante en el entorno cercano para que crezca y se haga fuerte
ResponderEliminarUn abrazo y buen inicio de semana!
Gracias, Cecilia, me alegra compartir contigo estos análisis.
EliminarUn fuerte abrazo.
Creo que no debemos dejar cuando pasamos un bache y salir adelante como nos cuentas en esta magnifica reflexión.
ResponderEliminarLa imagen de ese teatro en ruinas es desoladora y quien sabe si alguien es capaz de devolver a la vida.
Saludos.
Gracias, Tomás. Nada es imposible, al menos en una sola vida, amigo Tomás. Sólo propongo que se intente.
EliminarUn fuerte abrazo, amigo.
Qué hermosa e intensa reflexión haces, querido amigo ETF, eres todo un ejemplo de vida, y me gusta aferrarme a tus letras, creo que me hecho adicta porque las encuentro positivas, y amo las personas que piensan en positivo como lo haces tú. Que a pesar de tus limitaciones (como todos tenemos en un aspecto u otro) siempre ves el lado bueno, sabes valorar la vida, disfrutas de ella, y das valor a las cosas más simples. Y todo ello lo amo. De verdad, te admiro.
ResponderEliminarTodo tiene sentido, incluso las ruinas. Todo nos sirve para algo. Incluso lo que creemos que no vale para nada, incluso los días que nos salen las cosas mal. También merecen la pena. Porque nos sirve para crecer, para mejorar. Para seguir construyendo. Porque tenemos un futuro. Un futuro que vamos construyendo día a día. No importa la edad. Siempre tendremos ese futuro.
Que tengas una hermosa semana.
Un abrazo enorme.
Gracias, María. Eres un encanto.
EliminarFeliz semana para ti, también.